Las lluvias siempre son esenciales para el crecimiento de las plantas, pero un exceso de agua puede causar problemas graves, como raíces podridas, falta de oxígeno y enfermedades provocadas por hongos.
Si tus plantas han estado expuestas a demasiada lluvia y muestran signos de deterioro, es muy recomendable seguir algunos consejos clave para ayudarlas a recuperarse.
Cuando el exceso de agua por lluvia se acumula en el suelo puede provocar efectos adversos en el desarrollo y vida de las plantas. Aunque algunas especies toleran mejor que otras los encharcamientos, pero para aquellas más susceptibles de debilitarse podemos seguir algunos consejos para minimizar los daños al máximo.
Lo primero que debes hacer es inspeccionar la planta para detectar signos de daño. Algunos indicios de que el exceso de agua ha afectado su salud incluyen.
Las últimas lluvias, por su persistencia y cantidad, han dado lugar a que haya viñedos que ya no absorben más agua, pese a ser suelos blandos de cantos y arenas en superficie. ¿Cómo llamáis a este fenómeno de las tierras encharcadas por saturación de agua? #LaSecaEsViticultura pic.twitter.com/IBSFheX8xt
La Seca Cultura y Turismo (@RutaVinoVerdejo) March 26, 2025
Si el suelo está saturado de agua, es importante mejorar su drenaje para evitar que la planta sufra más daños. Puedes hacer lo siguiente.
Después de un período prolongado de lluvias, la planta no necesitará riego adicional hasta que el suelo se haya secado adecuadamente. Para evitar más acumulación de humedad, dejar que la tierra se seque antes de volver a regar.
Si notas hojas o tallos en mal estado, es recomendable podarlos para evitar que la planta gaste energía en tratar de recuperarlos. Se deben usar herramientas limpias y afiladas para cortar las partes afectadas, favoreciendo así un nuevo crecimiento.
Hablamos de la importancia de cuidar el cultivo, pero sin una tierra cuidada y nutrida no hay cultivo.
— Mercagrisa (@mercagrisa) April 6, 2022
Por eso es importante 𝐜𝐮𝐢𝐝𝐚𝐫 𝐞𝐥 𝐭𝐞𝐫𝐫𝐞𝐧𝐨.
Si está encharcado por la lluvia, se aconseja airear la tierra para conseguir que no se acumule tanta agua. pic.twitter.com/qneXvJV90z
El exceso de humedad puede fomentar la aparición de hongos y enfermedades. Para prevenir o tratar infecciones fúngicas, puedes aplicar fungicidas naturales o sintéticos.
Si las lluvias han sido persistentes y el ambiente sigue húmedo, se debe mejorar la ventilación, esto ayudará a reducir la humedad retenida en la planta. Para ello:
Una vez que la planta muestre signos de recuperación, puedes aplicar un fertilizante suave para ayudarla a recuperar nutrientes perdidos.
Optar por fertilizantes orgánicos o líquidos de liberación lenta para no sobrecargarla es una buena opción frente a productos químicos.